Moverse del sillón nunca estuvo de más
- Publicado en: Noticias
- Fecha: 5 Nov,2014
Hoy te vamos a proponer algo novedoso, porque aunque nuestro tema estrella es el mundo de las cuatro ruedas y de los 4×4, un poco de bicicleta por los mismos caminos por los que circulamos nunca está de más. Y es que con la vida que llevamos tan sedentaria e ineficaz, está claro que hay que buscar nuevas formas de afrontar el tiempo libre que supongan la realización de un deporte que nos permita ejercitar nuestro cuerpo y nuestra mente y nos deje respirar aire puro, que la verdad es que ya está bien de estar todos los días enclaustrado en nuestra casa. Por eso te vamos a proponer que hagas clic aquí y visites buscandoinfo.es, un buscador de empresas que te va a permitir contactar con las mejores tiendas de ciclismo del panorama actual. Nunca había sido tan sencillo ponerse en marcha. Eso sí, te vamos a dar algunas recomendaciones para que esta acción no la hagas a la ligera.
La primera cuestión tiene que ver con un asunto bastante claro y meridiano: hemos de tener claro qué queremos hacer y cómo. Ponerse a pedalear no es algo que se pueda hacer de la noche a la mañana, por eso te recomendamos que actúes con calma. Empieza por cosas sencillas y ve subiendo la intensidad del ejercicio. No puedes pretender correr el Tour de Francia nada más empezar con esta actividad, tienes que ser paciente porque de lo contrario te resultará complicado no frustrarte. Y si llegas a esta situación, mucho nos tememos que no prosperarás a la hora de rentabilizar tu tiempo encima del sillín.
Utiliza protección: casco, coderas y rodilleras, sobre todo al recorrer las pistas forestales. Y si puedes ponerte un maillot, mejor que mejor. Es la manera más adecuada de que te vean circulando por un camino o una carretera, y así irás protegido al máximo. Y por cierto, cuidado con las imprudencias, pueden causarte un accidente del que te acuerdes el resto de tu vida.
Lleva siempre la bici en buen estado: ruedas bien infladas, cadena y cambios engrasados, engranajes limpios, etc. Cuando se produce un problema mecánico porque no hemos cuidado de nuestra montura metálica es cuando lamentamos no haber dedicado treinta minutos tras la salida a limpiarlo todo. De ahí que sea esencial que tengas presente esta cuestión para que todo funcione a las mil maravillas.
Y por supuesto, el último consejo es el más pertinente: lleva contigo las herramientas necesarias para reparar un pinchazo. Quedarse tirado en un camino porque hemos sufrido esta circunstancia no es, a priori, algo con lo que vayamos a disfrutar. Por eso te recomendamos que lleves contigo siempre los parches, el pegamento, la bomba de aire y las llaves para desmontar la cubierta. Será la mejor manera de salir de un entuerto tan complicado como engorroso, y de poder volver a la civilización de una manera adecuada. Ya tendrás tiempo de coger tu 4×4 y volver por los mismos sitios, se trata de que también disfrutes con la naturaleza en pleno estado, ¿no crees?